febrero 2020

sábado, 8 de febrero de 2020

Anécdotas de los Oscar

Son muchas las anécdotas que surgen en cada gala de los Oscar. Sin embargo, recientemente se produjo una anécdota que jamás olvidaremos protagonizada por Warren Beatty y Faye Dunaway en los Oscar 2017. Los veteranos actores anunciaron que el Oscar a la Mejor película era para La La Land cuando en realidad era para Moonlight.

En el sobre que les pasaron desde el backstage hubo un error, por lo que les dieron el correspondiente a Mejor Actriz: Emma Stone por La La Land. Al abrirlo, Beatty solo leyó la segunda parte, por lo que anunció al musical como mejor película. En ese momento, el equipo de la película de Damien Chazelle subió al escenario a recoger su galardón, aunque desde el primer minuto se intuía que algo iba mal.



Otro de los momentos más recordados data de 1974, el año de El Padrino II y Asesinato en el Orient Express. David Niven era el encargado de dirigir la gala ese año. La sala estaba completa, el público tenía ganas de divertirse y había una larga lista de actores esperando su estatuilla. Todo parecía ir sobre ruedas hasta que un espontáneo se coló en el plató completamente desnudo mientras hacía el símbolo de la paz con su mano izquierda. Se trataba de un acto de protesta para reivindicar los derechos de los homosexuales. Se trataba de Robert Opel, un fotógrafo de profesión que había llegado hasta el backstage con una acreditación de prensa aunque hay quien sigue pensando que tenía cómplices en la organización.




Justo un año antes, en 1973, vimos cómo Marlon Brando conseguía un Oscar por su interpretación en la película El Padrino y también como el actor lo rechazaba. En su lugar, acudió a recogerlo una joven de ascendencia apache llamada Sacheen Littlefeather, quien cargaba con un contundente y largo discurso (que ocupaba 15 páginas). En él, el actor explicaba por qué había decidido rechazar el premio como protesta por el trato vejatorio que la industria del cine y la sociedad estadounidense había dado al pueblo nativo americano. La intención de la joven fue leer el documento, pero, ante la amenaza de ser detenida, resumió en un minutos los motivos por los que el actor renunciaba.




También ha habido discursos que nos han emocionado. Como el del italiano Roberto Benigni, que se paseó sobre los sillones y cabezas de los asistentes a los Oscar de 1999 antes de recoger su Oscar a la Mejor película extranjera por La vida es bella. El director y protagonista de la cinta recibió el galardón entre los aplausos de los asistentes, un reflejo del impacto que causó esta cinta europea. Benigni volvió a impregnar la situación con su alegría y su peculiar forma de ver la vida.



El Oscar que ganó Anna Paquin pilló por sorpresa a muchos de los presentes y es que solo tenía 11 años cuando interpretó El piano. La actriz no supo cómo reaccionar y estuvo casi un minuto en el atril con el Oscar en la mano mientras el público se reía porque la pequeña tenía hipo. Pero no fue la actriz más joven en hacerse con el premio. Shirley Temple recogió la estatuilla con solo seis años, pero se trataba de un premio de honor. Tatum O'Neal sí es la más joven ganadora de un Oscar oficial, con 10 años, por Luna de papel.


Aunque si hablamos de entregas de premios tenemos que recordar el «¡Pedrooo!» que gritó Penélope Cruz para anunciar el Oscar a mejor película en lengua no inglesa era para su amigo Almodóvar por Todo sobre mi madre.





No todos los «momentazos» han sucedido durante la gala. Hay algunos que ocurren antes de ella. En el año 2000 robaron el camión que transportaba las estatuillas desde Chicago a Los Ángeles. Aparecieron, pero desde entonces, la Academia siempre tiene galardones de reserva en sus almacenes. Aunque si hablamos de robos, el más sonado fue el que sufrió Frances McDormand. La actriz, que había ganado el galardón por Tres anuncios en las afueras y ya había grabado su nombre en la estatuilla, vio que su premio desapareció de una fiesta posterior a la gala en esa ciudad estadounidense.

Fuente: ABC.es

viernes, 7 de febrero de 2020

El Hollywood dorado sigue vivo

Kirk Douglas, fallecido este jueves a los 103 años, era de las últimas leyendas vivas del esplendor del cine clásico de Hollywood. Tras su muerte, no solo le sobrevive Olivia de Havilland como ejemplo de una época dorada que hace muchos años que desapareció todavía quedan más actores y directores que representan esa época, si bien no tan conocidos:

Olivia De Havilland, que cumplirá 104 años el próximo 1 de julio, sobrevivió también a su hermana, Joan Fontaine, fallecida en diciembre de 2013 a los 96 años. Además, ganó dos Óscar a la mejor actriz -en 1946 por To Each His Own y en 1949 por The Heiress- frente a ninguno para Douglas -tan sólo una estatuilla honorífica en 1996 después de tres nominaciones frustradas-, nadie pone en duda que el estrellato del protagonista de Espartaco fue mucho más brillante y duradero.

Su papel más recordado es sin duda el de la dulce Melania de Lo que el viento se llevó (1939). Establecida desde hace tiempo en París, Olivia apareció en público por última vez en junio del 2006 para viajar a Hollywood, donde fue objeto de un homenaje.

En activo sigue Kim Nnovak, la que más glamour conserva y a la que Cannes dedicó un homenaje en 2014 que demostró que sigue siendo la rubia perfecta y elegante que conquistó a Hitchcock. Y aunque se retiró del ojo público en 1965, sigue en el recuerdo de los amantes del cine como la protagonista de títulos como Vértigo (1958), Picnic (1955) o The man with the Golden Arm (1956).

Y pese a que en su momento no pertenecieron al círculo más restringido de las grandes estrellas o tinenen un tinte menos clásico, hay otros actores a los que ahora, pasados los 80 años, se les respeta y admira, como es el caso de Sidney Poitier, Julie Andrews, Dick van Dyke, Angela Lansbury, Tippi Hedren, Joanne Woodward, Liza Minnelli, Max von Sydow, Eva Marie Saint, Liv Ullman, Shirley MacLaine, Marsha Hunt, Hal Holbrook, Stuart Whitman, Arlene Dahl, Genevieve Page, Micheline Presle, Constance Towers, Terry Moore, Gina Llollobrigida, Sophia Loren, Robert Redford, Jane Fonda o Dustin Hoffman o Ann Blyth.

Para más información, se pude consultar la Lista de Estrellas vivas.






jueves, 6 de febrero de 2020

Fallece Kirk Douglas a los 103 años

Issur Danielovitch Demsky más conocido como Kirk Douglas, falleció este miércoles en su casa de California a los 103 años. Era hijo de un trapero nacido en Ámsterdam, en el Estado de Nueva York, el 9 de diciembre de 1916. 

La noticia fue confirmada por la familia por boca de su hijo Michael: “Para el mundo es una leyenda, un actor de la época dorada del cine, un filántropo comprometido con la justicia y con las causas en las que creía, pero para mí, para Joel y para Peter era sencillamente papá”. El ídolo de barro, el Chuck Tatum de El gran carnaval, el Jonathan de Cautivos del mal, el Jack de Los valientes andan solos... Quedarán los gritos de “Yo soy Espartaco”, el lanzamiento de hachas para la toma de la fortaleza de Los vikingos, el ruido y la furia de su militar de Senderos de gloria, su Van Gogh de El loco del pelo rojo… Quedarán las siete películas con su amigo Burt Lancaster... 

Será siempre considerado como uno de los grandes mitos del celuloide, aunque la Academia de Cine nunca lo reconoció como debería. Le negó en tres ocasiones el Oscar al mejor actor, por razones más políticas que cinematográficas, aunque se desquitó en 1996, cuando el por entonces Kodak Theatre se ponía en pie para ver cómo le concedían el Oscar honorífico. De manos de Steven Spielberg, el veterano actor recibía el cariño que tanto le habían negado sus compañeros de profesión en décadas anteriores. Casi rondaba los 90 años por aquellas fechas y muchos apostaban por que sería una de sus últimas apariciones públicas, pero había Douglas para rato.

Fuente: El País